sábado, 29 de agosto de 2009

Recorrido por impresionantes acantilados (Gran Canaria)

El oeste de Gran Canaria destaca por su abrupta y aparatosa orografía, grandes macizos se levantan desde el mar con acantilados que rondan los 300m y hasta los 1000m. Si se hace el recorrido desde Agaete hacia La Aldea de San Nicolás, se encontrarán con el primer gran acantilado y el más alto de todos llegando a medir algo más de 1000m sobre el nivel del mar (el risco Faneque); Faneque es un monstruoso escarpe que se asoma al mar, es una ramifiación del macizo de Tamadaba y está clasificado como el tercer acantilado costero más alto del mundo. Para comprobar el verdadero tamaño de semejante coloso hay que caminar encima de este y ver el mar desde esa altura (somos muy pequeños frente a las enormes esculturas de la naturaleza).






Fotografías de Tania de senderistas Gran Canaria (Faneque)

Pasando el barrio agaetense del Risco nos encontramos con una hilera de acantilados que destaca por su naturaleza volcánica (acantilados del Andén Verde) que también pertenecen al increíble macizo de Tamadaba; el más alto de esta hilera de escarpes mide unos 690m sobre el nivel del mar (una altura a tener en cuenta, incluso las pequeñas embarcaciones se ven como barquitos de papel sobre el mar desde esa altura). La carretera que cruza estos acantilados es peligrosa en invierno por los desprendimientos de piedras generada por las lluvias y sus curvas sinuosas que lo serpentea, además el vértigo está presente en todo el recorrido.




En una parte de esta hilera de escarpes volcánicos nos encontramos con un saliente arenoso que es conocido como punta de las Arenas (también como punta de Artenara o punta Góngora). Punta de las Arenas es un lugar como mucho encanto y que tiene muchas peculiaridades únicas en su entorno; un arenal de arena dorada cubre todo el saliente excepto la orilla que es mucho más rocosa, la única zona arenosa de la orilla de este lugar hermoso es la playa de la Virgen; la playa de la Virgen es un pequeño paraiso entre acantilados cuyas aguas son limpias y queda aislada de la masificación humana. Entre las plantas de zonas xerófilas (secas y subdesérticas) que crece en este lugar destaca la tabaiba dulce; pero las plantas psamófilo-halófilas son las más abundantes como la piña de mar, el chaparro o la uvilla de mar. La geología también adquiere importancia con dunas fósiles y algún que otro fenómeno geológico de notable importancia.









Fotografías de la punta de las Arenas: Tania y Olegario de senderistas Gran Canaria, excepto la primera.

Estos acantilados tienen sus propios microclimas, especialmente en otoño e invierno cuando llegan la niebla y las lluvias. En invierno las zonas bajas son mucho más secas, sufren una gran exposición al fuerte Sol subtropical y reciben poca agua de lluvia, mientras la zonas altas son bendecidas por las lluvias y la humedad. La flora más representativa de estos escarpes la conforma el cardón, existen especímenes de cardón de gran porte colgando de estos riscos costeros que desafían a la fuerza de la gravedad.


Otro saliente destacable y casi siempre omnipresente durante todo nuestro trayecto es la punta de la Aldea o cola del dragón, este saliente es el que más terreno gana al mar, así que se puede observar desde diferentes puntos del oeste gran canario, su forma se asemeja mucho a la cola del mitológico dragón. Desde el mirador del balcón se puede observar una amplia panorámica del mar y de estos riscos impresionantes.

Los colores del mar de esta zona de la isla adquiere una variedad cromática muy bella, se mezclan las tonalidades verdes, azules y turquesas.



Al final del trayecto nos encontramos con el pueblo más occidental de la isla (La Aldea de San Nicolás). Este pueblo costero está situado en un valle rodeado de grandes macizos como el de Tamadaba, Güigúí e Inagua. La Aldea es un pueblo que vive de la pesca y de los cultivos de inverdaneros. Este municipio posee los paisajes más salvajes y radicales de la isla, pese a ser áridos e inhóspitos guarda una belleza que convierte la Aldea en un lugar bello y digno de visitar.






Fotografía de Tania (visual de La Aldea desde Elviso).


En esta imágen vemos que limpia está la costa de La Aldea, y al fondo observamos los acantilados del macizo de Güigüí que posee unas hermosas playas de arena negra y parda, pero se merece una entrada completa y distinta (ya trataré este tema).


3 comentarios:

  1. Hola Nau.
    Adelante con tu proyecto y que vaya todo bien.
    No has podido comenzar mejor, haciendo honor a la zona oeste (que muchos desconocen en profundidad y por este motivo no suele gustar..), desde mi punto de vista, la mejor en cuestión de variedad de paisajes, clima, tranquilidad, etc..

    Un saludo.

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  2. Hola Nau, veo que te has metido de lleno con este proyecto.
    Espero que le des continuidad y que tengas mucho exito.
    Por cierto puedes utilizar mis fotos sin problema, siempre y cuando hagas buen uso de ellas. Un saludo y hasta pronto.

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  3. mucha suerte con esta interesante iniciativa y a buen seguro este blog sera muy seguido.
    Un abrazo

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