El parque natural no solo alberga este amplio campo de dunas, si no también un sector de Malpaís y un cono volcánico (Montaña Roja); precisamente esta montaña nos da la bienvenida a este increíble parque natural con sus distintos colores y su tierra tan "majorera". Un desierto de lava y tierra cubre parte del parque natural dando lugar a unos contrastes geológicos muy poco usuales.
Montaña Roja:
Zona costera donde predomina el Malpaís:
Las playas de Fuerteventura, al ser tan antiguas, han sido formadas por la erosión de las conchas de los moluscos durante millones de años. Lo que antes era un coraza y un hogar para un ser vivo, ahora se ha convertido en sustrato para especies de plantas y animales y ha creado nuevos ecosistemas. La arena es tan clara y blanca que tiñe de turquesa el mar que rodea la costa de este parque natural, todo una invitación a zambullirse en él.
Las vistas de la isla de Lobos y del sur de Lanzarote son dignas de fotografíar:
El viento en Corralejo es casi constante y algo molesto, pero en cambio es el creador de este singular paisaje que con su soplo desplaza metros cúbicos de granos de arena por día para dar formas a las blancas dunas. Fuerteventura es la isla donde mas sopla el viento porque carece de grandes macizos y cumbres que lo frene y también es la isla menos bendecida por los alisios.
La flora que abunda es la que ya mencioné en la anterior entrada (psamófilo-halófilas) que están adaptadas a un gran nivel de salinidad y aridez; podemos ver algunos ejemplos como la uvilla, la brusquilla y el balacón; los tarajales y las aulagas también abundan dando un toque más verde al paisaje. La fauna está representada por aves marinas y limícolas que viven gracias a los recursos que el mar ofrece, el símbolo animal de la isla (la hubara canaria) también habita en este árido lugar donde anida y cría a sus polluelos.
Una gaviota devorando carroña, la desplazó del mar a las dunas:
En la imágen vemos conchas de moluscos adheridos a la arena, testigos de la erosión y el cambio del tiempo: